Es probable que el banco central de Uruguay vuelva a recortar su tipo de interés de referencia en su próxima reunión de política monetaria en octubre, ya que la inflación ha caído a un mínimo de casi dos décadas, dijo el viernes a Reuters el gobernador Diego Labat.

El país sudamericano ha liderado el pivote de la región hacia el recorte de tipos tras las fuertes subidas de los bancos centrales de toda América Latina en los últimos años para frenar los precios, un agresivo ciclo de endurecimiento que ayudó a muchos a tener la inflación bajo control.

"Las tasas de interés hoy están en 10%, probablemente podamos bajar las tasas en la próxima sesión, aunque depende de la trayectoria de la inflación", dijo Labat en una entrevista en el banco central de Uruguay en el centro de Montevideo.

Uruguay vio bajar la inflación anual al 4,1% el mes pasado, el nivel más bajo desde 2005, lo que ha abierto la puerta a una mayor relajación. El banco central ha recortado los tipos tres veces este año, tras bajar por primera vez el tipo al 11,25% desde el 11,5% en abril.

"La inflación va por buen camino", dijo Labat, añadiendo que era optimista sobre los precios hacia finales de año, que, según dijo, suelen tener una inflación baja. El banco iba por buen camino, añadió, para alcanzar su objetivo de inflación anual del 5% este año.

Se prevé que la economía uruguaya, impulsada por la agricultura, crezca este año sólo un 1%, por debajo del 4,9% del año pasado, debido a una grave sequía que causó estragos en las economías agrícolas exportadoras de toda la región a finales de 2022.

Pero Labat confía en que la economía uruguaya repunte con fuerza el próximo año.

"Somos muy optimistas respecto a 2024, con una previsión de (crecimiento del) PIB del 4%", dijo Labat, que atribuyó en gran medida a unas cosechas más prometedoras.