Owino toma el relevo de Haron Sirima, que en enero declaró a los medios locales que quería dejar paso a alguien más joven.
"Su experiencia (la de Owino) en la gestión de la deuda pública, en particular en la consecución y el mantenimiento de una deuda pública sostenible, la reducción de los costes del servicio de la deuda a largo plazo y la gestión del riesgo de los pasivos contingentes, será un activo importante", declaró el ministerio de Finanzas en un post en la plataforma de medios sociales X.
Las finanzas públicas de Kenia estuvieron en el punto de mira a principios de este año por la preocupación de que pudiera incumplir el pago de un bono internacional de 2.000 millones de dólares, y más recientemente por las violentas protestas que obligaron al presidente William Ruto a retirar las subidas de impuestos previstas.
La retirada de las subidas de impuestos podría complicar los esfuerzos por cumplir los objetivos del Fondo Monetario Internacional y encarecer los préstamos, según los inversores y analistas.
El Ministerio de Finanzas recompró la mayor parte del bono de 2.000 millones de dólares en febrero emitiendo un nuevo bono de 1.500 millones de dólares antes de pagar el resto el mes pasado. (Reportaje de George Obulutsa Edición de Alexander Winning y Christina Fincher)
