En la visita, en la que estuvo acompañado por altos funcionarios, el líder instó a la fábrica a desempeñar un papel importante en la solución de la crisis alimentaria, que describió como un negocio importante para el futuro del país.

Kim también pidió que se fijaran objetivos para modernizar el proceso de producción de maquinaria agrícola del país y para que alcanzara el nivel de "clase mundial", según el informe.

Corea del Norte ha estado impulsando la agricultura en medio de la creciente preocupación por la escasez de alimentos. Algunos analistas han dicho que la fábrica también podría fabricar piezas para vehículos de lanzamiento de misiles.

El ministro de Unificación de Corea del Sur, encargado de las relaciones con su vecino, declaró a principios de año que la situación alimentaria en el Norte "sigue siendo mala" a pesar de un pequeño aumento del comercio con China.

El Norte ha sufrido una grave escasez de alimentos en las últimas décadas, incluida una hambruna en los años noventa, a menudo como consecuencia de catástrofes naturales, y los expertos internacionales han advertido de que el cierre de fronteras durante la pandemia del COVID-19 empeoró la situación.

A principios de esta semana, Kim criticó a los altos funcionarios por su respuesta a los daños causados por las inundaciones, que incluyeron más de 270 hectáreas (667 acres) de arrozales, según informó la agencia de noticias KCNA.

La semana pasada, la KCNA también informó de que Kim había inspeccionado las tierras de cultivo afectadas por el tifón tras el paso de la tormenta tropical Khanun por la península coreana.

Kim alabó los esfuerzos de los militares por salvar las cosechas y dijo que las tropas se movilizaron porque no pueden perder ni una parcela de tierra de cultivo "por el embate de la naturaleza en el frente agrícola directamente relacionado con la vida del pueblo", según el informe.