Al menos 25 casos de una nueva y peligrosa cepa de viruela del Congo que se propaga por la República Democrática del Congo han sido detectados en la ciudad oriental de Goma, principalmente en campamentos que albergan a personas que huyen de un conflicto circundante, informaron el miércoles las autoridades sanitarias.

El Congo ha registrado 20.000 casos y más de 1.000 muertes por mpox, principalmente entre niños, desde principios de 2023. En lo que va de año se han registrado más de 11.000 casos, incluidas 443 muertes.

Las autoridades aprobaron recientemente el uso de vacunas para hacer frente al repunte, pero actualmente no hay ninguna disponible fuera de los ensayos clínicos en el país.

El jefe del equipo nacional de respuesta contra la epidemia de mpox, Cris Kacita, declaró en una entrevista que la mayoría de los nuevos casos registrados se daban en campos de desplazados.

Dijo que los casos estaban infectados con una nueva cepa del virus que se está propagando en la provincia de Kivu del Sur. Goma es la capital y la ciudad más grande de la vecina provincia de Kivu del Norte.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) y los científicos dieron la voz de alarma el mes pasado sobre la situación del mpox en el Congo, incluida la propagación de una nueva cepa de mpox que se está extendiendo en Kivu del Sur.

El mpox ha sido endémico en el Congo durante décadas, pero el año pasado surgió una nueva variante del clado I del virus. Se trata de una infección vírica que se propaga a través del contacto íntimo, causando síntomas parecidos a los de la gripe y lesiones llenas de pus. La mayoría de los casos son leves pero puede matar.

Una forma diferente y menos grave de mpox - el clado IIb - se propagó por todo el mundo en 2022, en gran parte a través del contacto sexual entre hombres que tienen relaciones sexuales con hombres. Esto llevó a la OMS a declarar una emergencia de salud pública que ahora ha terminado, aunque todavía hay casos y la agencia ha dicho que el mpox sigue siendo una amenaza para la salud pública.

"El instituto nacional de investigación biomédica de Goma ha secuenciado el virus y esto demuestra que el virus ha estado circulando durante mucho tiempo en la ciudad de Goma", declaró Kacita.

"El riesgo aquí es la promiscuidad en los campamentos y la rapidez con la que se está extendiendo la epidemia", advirtió.

Cientos de miles de personas que huyeron del conflicto en el este del Congo, golpeado por la insurgencia, se alojan en campamentos superpoblados en Goma y sus alrededores.

El número de desplazados ha aumentado desde que un grupo rebelde conocido como el M23 lanzó una gran ofensiva en 2022, provocando respuestas militares nacionales y regionales que han luchado por frenar el avance de la milicia.