Los 220 TWh constituían el escenario base de la empresa para el crecimiento de la demanda, por encima de los 140 TWh actuales y 30 TWh por encima de su anterior previsión dada hace dos años, según Statnett.

En un escenario de alto crecimiento, la demanda casi se duplicaría hasta los 260 TWh, 40 TWh más que en el informe anterior.

"El aumento se debe tanto a la conversión a emisiones cero mediante la electrificación como al establecimiento de una nueva industria verde", declaró en un comunicado la directora de Statnett, Hilde Tonne.

Según el informe, las ambiciones noruegas de emisiones netas cero añadirán por sí solas una demanda adicional de electricidad de entre 40 y 60 TWh.

La herramienta clave de Noruega para alcanzar un objetivo provisional de reducción de emisiones del 55% para 2030 es electrificar sus plataformas marinas de petróleo y gas, sustituyendo las turbinas impulsadas por gas.

Además, el país también pretende ampliar su base industrial a fábricas de baterías y procesos de alto consumo energético como la producción limpia de hidrógeno y amoníaco.

Statnett opera el sistema de transmisión de alta tensión de Noruega que transporta la energía a grandes distancias y conecta a los usuarios finales industriales, así como a los operadores de la red de distribución.

En los últimos cuatro años, ha recibido solicitudes de conexión a la red que equivalen a una duplicación de la demanda de energía, según Statnett.

Pero incluso en su escenario de bajo crecimiento, en el que no se realizará toda esta demanda, el consumo elevaría la demanda a 190 TWh y requeriría muchas nuevas líneas de red y recursos de generación eléctrica, añadió.

Statnett advirtió el año pasado de que Noruega podría registrar un déficit eléctrico ya en 2027.