El Papa está a punto de llegar a Sudán del Sur procedente de la vecina República Democrática del Congo, con la esperanza de sacudir un proceso de paz encaminado a poner fin a una década de conflicto librado principalmente en líneas étnicas que ha matado a cientos de miles de personas.

Después de que combatientes de un grupo rebelde mataran a seis personas de una comunidad de pastores, éstos tomaron represalias el jueves matando a 21 civiles en una zona cercana, incluidos cinco niños y una mujer embarazada, dijo el comisionado del condado de Kajo-Keji, Phanuel Dumo.

Un acuerdo de paz firmado en 2018 por las principales partes de la guerra civil desde 2013 hasta 2018 ha reducido significativamente la violencia en Sudán del Sur en los últimos años, pero los enfrentamientos de menor nivel entre comunidades rivales estallan con regularidad.

El arzobispo de Canterbury, que acompaña al papa a Sudán del Sur, dijo estar horrorizado por los últimos asesinatos.

"Es una historia que se oye con demasiada frecuencia en todo Sudán del Sur. Vuelvo a hacer un llamamiento a una vía diferente: que Sudán del Sur se una por una paz justa", dijo en Twitter.