El oro se hundió, el dólar repuntó y los rendimientos de referencia del Tesoro estadounidense subieron después de que el Departamento de Trabajo informara de un crecimiento de los costes laborales en el primer trimestre mayor de lo esperado, lo que probablemente no alterará la postura restrictiva de la Fed.
"La venta masiva se desencadenó por el índice de costes laborales superior al previsto", dijo Jay Hatfield, gestor de carteras de InfraCap en Nueva York. "Y los inversores se están posicionando ante lo que probablemente será una conferencia de prensa de línea dura tras la reunión de la Fed".
Los tres principales índices estadounidenses van camino de registrar sus primeras pérdidas porcentuales mensuales desde octubre.
"Hemos alcanzado nuevos máximos en el S&P este año, pero llega un momento en que el mercado necesita digerir esas ganancias", Sam Stovall, estratega jefe de inversiones de CFRA Research en Nueva York. "El viejo adagio de 'vender en mayo' podría haberse hecho realidad un mes antes".
El Comité de Mercado Abierto de la Reserva Federal (FOMC) se reúne el martes para su reunión de política monetaria, que se espera culmine el miércoles con la decisión de mantener el tipo objetivo de los fondos federales en el rango del 5,25%-5,50%.
La declaración adjunta, así como la posterior conferencia de prensa del presidente de la Fed, Jerome Powell, serán analizadas en busca de pistas sobre el camino que espera seguir el banco central con respecto a los recortes de los tipos de interés.
"Sabemos que la Fed va a ser halcón, y habrá preguntas sobre la subida de tipos", añadió Hatfield. "Esa será la respuesta monetaria, dependiendo de cuánto se retraiga al respecto".
La temporada de resultados del primer trimestre ha superado su ecuador, con una serie de resultados de alto perfil esta semana, entre ellos los de Amazon.com y Apple Inc.
Los analistas ven ahora un crecimiento agregado de los beneficios del primer trimestre del S&P 500 del 6,0% interanual, por encima de la estimación del 5,1% a 1 de abril, según mostraron los datos de LSEG.
El índice industrial Dow Jones cayó 407,17 puntos, o un 1,06%, hasta los 37.978,92 puntos. El S&P 500 perdió 47,17 puntos, o un 0,92%, hasta los 5.069 y el Nasdaq Composite cayó 180,07 puntos, o un 1,13%, hasta los 15.803,01.
Las bolsas europeas terminaron a la baja, ya que una serie de resultados poco alentadores mermaron el ánimo de los inversores frente a los datos económicos optimistas y la mayor probabilidad de que el Banco Central Europeo pueda recortar los tipos de interés en junio.
El índice paneuropeo STOXX 600 perdió un 0,68% y el indicador MSCI de valores de todo el mundo cedió un 0,79%.
Los valores de los mercados emergentes perdieron un 0,57%. El índice MSCI más amplio de acciones de Asia-Pacífico fuera de Japón cerró un 0,38% a la baja, mientras que el Nikkei japonés subió un 1,24%.
El dólar recuperó algo de fuerza frente a una cesta de divisas mundiales y el yen se debilitó frente al billete verde, recortando ganancias tras las sospechas de intervención monetaria por parte de las autoridades japonesas el lunes.
El índice dólar subió un 0,57%, mientras que el euro bajó un 0,37% hasta los 1,0679 dólares.
El yen japonés se debilitó un 0,86% frente al billete verde, situándose en 157,70 por dólar, mientras que la libra esterlina cotizaba por última vez a 1,2503 dólares, un 0,46% menos en el día.
Los rendimientos de los bonos del Tesoro de EE.UU. subieron tras el informe de los costes laborales, más alcista de lo esperado, mientras los inversores esperaban la decisión de la Fed.
Las notas de referencia a 10 años cayeron 18/32 en precio para rendir un 4,684%, desde el 4,612% a última hora del lunes.
El bono a 30 años cayó 25/32 en precio para rendir un 4,7881%, desde el 4,737% a última hora del lunes.
Los precios del crudo cayeron por el alivio de las tensiones geopolíticas, ya que las conversaciones de paz entre Israel y Hamás avanzaron y los datos estadounidenses mostraron una producción y unas exportaciones de crudo saludables.
El crudo estadounidense cayó un 0,85% y se situó en 81,93 dólares por barril, mientras que el Brent se situó en 87,86 dólares por barril, un 0,61% menos en la jornada.
Los precios del oro cayeron a mínimos de una semana antes de la reunión de la Fed, pero se mantuvieron en la senda de su tercera subida mensual consecutiva.
El oro al contado cayó un 1,8% hasta los 2.292,69 dólares la onza.
