Las acciones chinas cerraron a la baja el lunes, después de que los datos mostraran que la economía del país creció a un ritmo frágil en el segundo trimestre, al debilitarse la demanda en el país y en el extranjero, lo que aumentó la presión sobre los responsables políticos para que ofrezcan más estímulos para apuntalar la actividad.

** El índice CSI 300 de valores de primer orden de China cerró con un descenso del 0,8%, mientras que el índice compuesto de Shanghai bajó un 0,9%.

** El mercado de Hong Kong permaneció cerrado durante todo el día debido a la proximidad del tifón Talim.

** En términos interanuales, el PIB de China se expandió un 6,3% en el segundo trimestre, acelerándose desde el 4,5% de los tres primeros meses del año, pero la tasa estuvo por debajo de la previsión de crecimiento del 7,3%.

** Los datos también mostraron que las ventas inmobiliarias de China entre junio y mayo registraron la mayor caída mensual de este año, basándose en las ventas por superficie, y la inversión inmobiliaria también se desplomó.

** "Para contrarrestar los persistentes vientos en contra del crecimiento, esperamos más medidas (selectivas) de flexibilización en los próximos meses, centradas en los ámbitos fiscal, de la vivienda y del consumo, aunque la magnitud del estímulo debería ser menor que en anteriores ciclos de flexibilización", señaló Goldman Sachs en una nota.

** La mayoría de los sectores cayeron. Las empresas energéticas cayeron un 2,4%, mientras que las acciones de bancos y medios de comunicación perdieron un 1,5% y un 1,9%, respectivamente.

** Por otra parte, el banco central de China renovó el lunes los préstamos de política a medio plazo que vencían y mantuvo el tipo de interés sin cambios, tal y como se esperaba, aunque los mercados esperan que las autoridades tengan que desencadenar más estímulos para apoyar la ralentización del crecimiento económico.

** Todas las miradas están puestas en una esperada reunión del Politburó a finales de este mes, en la que los máximos dirigentes podrían trazar el rumbo de la política para el resto del año.