China ha sometido a Shangai a un estricto bloqueo desde finales de marzo y la vecina Kunshan también ha endurecido las restricciones para controlar el mayor brote de COVID-19 del país desde que se descubrió el coronavirus a finales de 2019 en la ciudad de Wuhan.
Las empresas mundiales, desde los fabricantes de teléfonos móviles hasta los de chips, dependen en gran medida de China y del sudeste asiático para su producción y han estado diversificando sus cadenas de suministro después de que la pandemia causara estragos.
Entre las empresas taiwanesas que hicieron anuncios en la bolsa figuraba Asia Electronic Material Co Ltd, que fabrica piezas para ordenadores portátiles, teléfonos móviles y cámaras digitales.
Dijo que su planta en Kunshan estaría cerrada hasta el próximo martes, añadiendo que era "difícil estimar" el impacto financiero.
EFUN Technology Co Ltd, que fabrica piezas para pantallas de cristal líquido, dijo que su planta en la cercana Suzhou también estaría cerrada hasta el martes, y que reanudaría sus operaciones cuando el gobierno diera el visto bueno, aunque añadió que no preveía un impacto financiero por el momento.
El fabricante de sustratos para chips y placas de circuitos impresos Unimicron Technology Corp, que también suministra a Apple Inc e Intel, dijo a última hora del martes que el cierre de sus operaciones en Kunshan también se extendería hasta el próximo martes.
Afirmó que estaba "integrando" sus recursos y su fabricación para aminorar el impacto en los clientes, y añadió que sus dos filiales de Kunshan representaron alrededor del 13% de los ingresos consolidados en el primer trimestre de este año.
La taiwanesa Pegatron Corp, que ensambla los iPhones para Apple, dijo anteriormente el martes que había suspendido las operaciones en sus plantas de Shanghai y Kunshan debido a los estrictos protocolos COVID-19 del gobierno. (Reportaje de Ben Blanchard; Edición de Christopher Cushing y Kim Coghill)
