Los precios de la electricidad para los hogares en Bosnia están subvencionados por el Estado y suponen una décima parte de los precios del mercado internacional. En cambio, el precio del gas ha aumentado casi un 100% desde el invierno pasado, debido principalmente a la subida de los precios del petróleo.
Como consecuencia, la gente está pasando a utilizar calefactores eléctricos gracias a la electricidad subvencionada.
"Bosnia-Herzegovina puede dejar de exportar si este proceso continúa a corto plazo", declaró Edhem Bicakcic, presidente de la rama bosnia del Consejo Internacional de Grandes Redes Eléctricas (CIGRE).
"No es razonable que utilizar electricidad para la calefacción sea más barato que hacerlo con combustible de pellets o leña", dijo Bicakcic.
Bosnia exporta alrededor del 25% de su electricidad, que se genera principalmente con carbón de producción local o de centrales hidroeléctricas.
En los nueve primeros meses de 2022, las exportaciones de electricidad ascendieron a más de 900 millones de marcos bosnios (450 millones de dólares) y representaron el 7% de las exportaciones totales del país.
Dos tercios de la electricidad se destinaron a los vecinos Croacia, Serbia y Eslovenia, que se verán afectados si Bosnia corta el suministro, declaró Ahmed Egrlic, vicepresidente de la Cámara de Comercio Exterior de Bosnia.
Egrlic también dijo que la red eléctrica de Bosnia no está diseñada para un alto consumo de electricidad por parte de los hogares y que un cambio masivo a aparatos eléctricos para la calefacción podría hacer caer el sistema.
Las compañías eléctricas también salen perdiendo, ya que un aumento de las ventas subvencionadas en el país les priva de cientos de millones de marcos en ingresos por exportación, que podrían utilizarse para modernizar las anticuadas centrales de carbón y construir instalaciones de energías renovables, según los expertos del sector.
La distribuidora eléctrica Elektrokrajina Banja Luka ha propuesto a las autoridades y a la empresa Elektroprivreda RS (ERS) que se subvencione la calefacción con biomasa.
Bloques enteros de apartamentos de la ciudad de Banja Luka han cancelado sus cuentas de calefacción por biomasa debido a las elevadas facturas.
"Las subvenciones (a la biomasa) serían rentables debido a las enormes diferencias entre los precios de la electricidad en los mercados internacionales y los de los hogares", declaró a Reuters Predrag Klincov, portavoz de Elektrokrajina.
Explicó que en los mercados internacionales las compañías eléctricas pueden vender la electricidad a un precio que se prevé que alcance los 900 euros/MWh en invierno, mientras que los hogares pagan ahora sólo 30 euros/MWh.
"Por cada kilovatio/hora de energía que se gaste en calefacción, el ERS tendrá una pérdida directa de decenas de millones de marcos sólo en Banja Luka", dijo Klincov.
(1$ = 2,0 marka bosnios)
