Eurostat, la oficina de estadística de la Unión Europea, declaró que las ventas al por menor en los 20 países que comparten el euro aumentaron un 0,3% intermensual en enero, lo que supone un descenso interanual del 2,3%.

Este dato quedó muy por debajo de las expectativas de los economistas encuestados por Reuters, que preveían una subida intermensual del 1,0% y una caída interanual del 1,8%.

Los economistas consideran que las ventas al por menor son un buen indicador indirecto de la demanda de los consumidores, que se ha resentido debido a la inflación galopante, provocada principalmente por la subida de los precios de la energía y los alimentos, pero que también se ha filtrado a otros sectores de la economía.