Los generales reafirmaron las declaraciones de este verano de que los militares "saldrían de la escena política y se centrarían plenamente en sus deberes, tal y como establece la constitución y la ley", tras el nombramiento de un gobierno civil, según el comunicado.

Los militares de Sudán tomaron el poder en un golpe de Estado en octubre que puso fin a un acuerdo de reparto del poder con los partidos civiles pro-democracia, sumiendo al país en la confusión política y económica.

Los esfuerzos de mediación dirigidos por las Naciones Unidas, la Unión Africana y las potencias extranjeras no han llegado a buen puerto. Los grupos civiles han exigido la salida completa e inmediata de los militares de la política.

Fuentes dijeron a Reuters que a principios de esta semana Burhan se había reunido con embajadores de Estados Unidos, Reino Unido, Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos para discutir soluciones políticas a la crisis.

Un borrador de constitución distribuido por el Colegio de Abogados de Sudán en las últimas semanas ha recibido elogios de algunos grupos políticos, así como del general Dagalo, líder de las controvertidas Fuerzas de Apoyo Rápido, en una declaración realizada esta semana.

El movimiento sudanés a favor de la democracia, dirigido por los comités de resistencia de los barrios, ha celebrado manifestaciones semanales desde el golpe, la última de las cuales está prevista para el sábado en la ciudad de Bahri.