Subieron hasta un 30% en las primeras operaciones.

El salto se produjo después de que Rusia cortara el suministro a través del oleoducto clave Nord Stream 1.

Dice que ha encontrado una fuga que dejará la instalación fuera de servicio hasta nuevo aviso.

Europa dice que Moscú sólo está armando el suministro de energía en represalia por las sanciones occidentales.

Nord Stream 1 solía transportar alrededor de un tercio del gas ruso que se exportaba a Europa, aunque recientemente ha estado funcionando a sólo una quinta parte de su capacidad habitual.

Los suministros de gas ruso a través de Ucrania, otra ruta importante, también se han reducido.

Todo ello deja a Europa luchando por encontrar fuentes alternativas antes del invierno.

Varios estados han puesto en marcha planes de emergencia que podrían llevar a un racionamiento energético.

Alemania está trabajando rápidamente para abrir nuevas terminales de importación de gas, mientras que Noruega -un importante productor europeo- está bombeando más.

Aun así, los expertos dicen que podría ser difícil para la región encontrar suministros suficientes cuando llegue el invierno.

Todo ello hace que los miembros de la UE busquen formas de frenar la subida de los precios, que podría dejar a millones de personas en situación de penuria económica.

El lunes, la creciente crisis energética también sacudió a los mercados en general.

El euro se hundió por debajo de los 99 centavos de dólar por primera vez en 20 años, y la libra esterlina también cayó.