Con la llegada del Año del Conejo, los mercados asiáticos se despojaron de parte del nerviosismo observado durante la noche en Wall Street, intentando un ligero repunte del riesgo. Sin embargo, la escasa liquidez mantendrá limitadas las ganancias, y es poco probable que desaparezcan los temores a una ralentización económica junto con la preocupación por que la Reserva Federal mantenga los tipos de interés más altos durante más tiempo.
Una nueva preocupación se ha añadido a la bandeja de entrada de la angustia de los inversores: el techo de la deuda estadounidense, ya que el gobierno de EE.UU. alcanzó el jueves su límite de endeudamiento de 31,4 billones de dólares. Pero con el Tesoro de EE.UU. utilizando medidas extraordinarias de gestión de tesorería, evitando el impago hasta el 5 de junio, los mercados pueden no estar inmediatamente preocupados.
Entonces, ¿qué es lo siguiente? Un pulso entre la Cámara de Representantes, controlada por los republicanos, y los demócratas del presidente Joe Biden sobre la elevación del techo, que los inversores esperan que se resuelva y no dé lugar a una repetición de la crisis de 2011.
Mientras tanto, la inflación al consumo de Japón tocó un nuevo máximo de 41 años, lo que mantiene las especulaciones de que el Banco de Japón acabará abandonando su política monetaria ultra flexible.
Hace tan sólo dos días, el Banco de Japón desafió las expectativas del mercado y se mantuvo firme en su política de control de la curva de rendimientos, pero el mercado está dispuesto a apostar a que el banco central cambiará pronto de tono.
Hablando de bancos centrales, el Banco Central Europeo se ha opuesto con fuerza a las apuestas del mercado de que realizaría menores subidas de tipos como resultado de la relajación de la inflación.
Es probable que continúe la retórica de halcones, ya que la presidenta del BCE, Christine Lagarde, volverá a hablar en Davos tras subrayar el jueves que el banco central mantendrá el rumbo de las subidas de tipos para domar la inflación.
La atención de los inversores se centrará en las ventas minoristas británicas de diciembre, que se espera que suban un 0,5%, para calibrar cómo aguantó el gasto de los consumidores durante las Navidades ante la crisis del coste de la vida.
Mientras tanto, otro muerde el polvo en el planeta cripto después de que una unidad de préstamos de la firma de criptomonedas Génesis solicitara la protección por quiebra.
Acontecimientos clave que podrían influir en los mercados el viernes:
Acontecimientos económicos: Ventas minoristas de diciembre en el Reino Unido, precios de producción de diciembre en Alemania
Oradores: Kristalina Georgieva del FMI y Christine Lagarde del BCE hablarán en Davos
