En México, donde algunos periódicos y la televisión se dedican a informar sobre el crimen con "nota roja", décadas de violencia han dejado más de 100.000 desaparecidos y han impulsado recientemente los esfuerzos para reestructurar las fuerzas de seguridad del país.

La ONG, que definió las atrocidades como el uso intencionado de la fuerza para maltratar gravemente, mutilar, matar o provocar el terror, contabilizó 5.463 víctimas de 3.123 sucesos denunciados en 2.657 noticias.

"Este trabajo señala un cúmulo de historias que presentan un mosaico de dolor y crueldad, oculto tras las estadísticas criminales", dijo la organización en un comunicado.

"El propósito de nuestro estudio es rescatar nuestra capacidad de conmovernos ante la acumulación de horrores".

Aunque el estudio no es exhaustivo, subraya la gravedad y el número de atrocidades que se registran cada día en México.

En el primer semestre de 2022, el estudio descubrió que el número de informes de tortura se duplicó hasta llegar a 856, mientras que los de asesinato de mujeres con "extrema crueldad" aumentaron un 87% hasta llegar a 410.

Las denuncias de violencia de "alto impacto" por parte de grupos criminales contra autoridades o grandes multitudes, mientras tanto, aumentaron 756%, de 25 a 214.

Aunque el problema del crimen organizado domina el debate público, el estudio señala que una gran parte de la violencia fue perpetrada por individuos, familias y comunidades.

Más allá del trabajo policial, el problema de la violencia requiere un trabajo sociológico y psicológico especializado a escala nacional, señaló.

El grupo publicó su informe el mismo día en que la cámara baja del Congreso mexicano debatía un controvertido proyecto de ley para poner a la guardia nacional dirigida por civiles bajo el control del ejército, lo que, según los críticos, militarizaría la ley y el orden.

Las denuncias de violencia aumentaron en todos los estados de México, pero se concentraron en el estado costero del Pacífico, Baja California, donde casi se triplicaron, así como en los estados centrales de Guanajuato y Michoacán.


Atrocidades reportadas en los medios de comunicación de todo México: