Las nuevas normas, que se aplicarán a los funcionarios federales, locales y estatales, tienen como objetivo combatir el blanqueo de dinero y la corrupción y están en consonancia con los esfuerzos del gobierno para que la nación más poblada de África avance hacia una economía sin dinero en efectivo.

"Los funcionarios son cada vez más vulnerables al blanqueo de capitales y a sus delitos subyacentes debido a su exposición a las retiradas de efectivo de las cuentas públicas", declaró en el comunicado el director y jefe ejecutivo de la NFIU, Modibbo R. HammanTukur.

El análisis de la NFIU reveló que, entre 2015 y 2022, los funcionarios retiraron casi 1,1 billones de nairas (2.450 millones de dólares) de las cuentas públicas, la mayor parte de ellos superando los límites de retirada anteriores.

"En el improbable caso de que un funcionario público considere que puede necesitar una retirada de efectivo, puede solicitar la aprobación de una exención a la presidencia, que puede concederse caso por caso", dijo HammanTukur en el comunicado.

El mes pasado, el banco central de Nigeria empezó a poner en circulación billetes de 200, 500 y 1.000 nairas de nuevo diseño y limitó las retiradas semanales de efectivo con el fin de frenar la inflación y avanzar hacia una economía sin efectivo.

Casi el 85% de los 3,23 billones de nairas (7.200 millones de dólares) en efectivo en circulación se mantiene ahora fuera de los bancos.

(1$ = 449,5500 naira)