Los fiscales federales de Manhattan afirmaron el mes pasado que Bankman-Fried robó miles de millones de dólares a clientes de FTX para pagar deudas de su fondo de cobertura centrado en las criptomonedas, Alameda Research, comprar suntuosos inmuebles y hacer donaciones a campañas políticas estadounidenses.
Se ha declarado inocente.
"No robé fondos y, desde luego, no escondí miles de millones", escribió Bankman-Fried en el blog publicado en Substack, en una rara declaración pública de un acusado penal estadounidense.
Los abogados defensores suelen aconsejar a sus clientes que guarden silencio antes del juicio porque los fiscales pueden utilizar sus comentarios en su contra ante el tribunal. Está previsto que su juicio comience el 2 de octubre de 2023.
Un portavoz de Bankman-Fried declinó hacer comentarios.
En el post, Bankman-Fried no abordó directamente muchos de los otros cargos presentados contra él por los fiscales federales en Manhattan el mes pasado, a saber, que engañó a los inversores y prestamistas sobre las condiciones financieras de FTX y Alameda.
Escribió que Alameda no logró protegerse contra una caída "extrema" de los mercados de criptomonedas, que finalmente se produjo el año pasado.
"A medida que Alameda se volvía ilíquida, FTX International también lo hacía, porque Alameda tenía una posición de margen abierta en FTX", escribió Bankman-Fried.
El multimillonario de 30 años también dijo que el ala estadounidense de FTX es "totalmente solvente" y que su unidad internacional tiene muchos miles de millones de dólares en activos.
"Si se reiniciara, creo que existe una posibilidad real de que los clientes pudieran recuperarse sustancialmente", escribió.
El mes pasado, dos de sus colaboradores más cercanos se declararon culpables de estafar a los clientes de la plataforma de negociación y aceptaron cooperar con la investigación de los fiscales.
Caroline Ellison, ex directora ejecutiva de Alameda, dijo en su declaración de culpabilidad que Bankman-Fried y otros ejecutivos de FTX recibieron miles de millones de dólares en préstamos secretos de Alameda.
Bankman-Fried fue puesto en libertad con una fianza de 250 millones de dólares en diciembre y bajo arresto domiciliario en la casa de sus padres en Palo Alto, California, que fue pignorada como garantía para su regreso a los tribunales.
