Un vistazo a la jornada en los mercados europeos y mundiales de la mano de Rae Wee

El año bursátil 2024 arrancó en Asia con un repunte del bitcoin, una subida de los precios del oro y una nueva caída de los mercados chinos, todo lo cual apunta a que, incluso en Año Nuevo, la narrativa de los mercados no ha cambiado en absoluto.

Las operaciones se diluyeron en horario asiático con Japón fuera de vacaciones, aunque las expectativas de que 2024 podría marcar el inicio de un ciclo de relajación mundial siguieron siendo el motor dominante del mercado, y los inversores continuaron encontrando todas las razones para aferrarse al optimismo.

Los mercados financieros tampoco parecieron demasiado conmocionados por el fuerte terremoto que sacudió el centro de Japón el día de Año Nuevo.

En un nuevo impulso al apetito por el riesgo, la mayor criptodivisa del mundo, el bitcoin, subió el martes por encima de los 45.000 dólares por primera vez desde abril de 2022, ampliando su fuerte racha del año pasado, donde saltó más de un 155%, su mejor año desde 2020.

Con el calendario de datos relativamente escaso para el día, parece que hay poco en el camino para influir en los inversores que apuestan por una serie de recortes de tipos a partir de principios de este año, al menos hasta el final de la semana, cuando llegue una lectura de la inflación de la zona euro y las cifras de empleo de Estados Unidos.

Los precios de los futuros siguen apuntando a una probabilidad de aproximadamente el 85% de que la Reserva Federal comience a relajar los tipos en marzo, según la herramienta FedWatch de CME, mientras que más de 150 puntos básicos de recortes de tipos del Banco Central Europeo han sido igualmente descontados para todo 2024, y aproximadamente 140 puntos básicos del Banco de Inglaterra.

En China, las peticiones de un mayor apoyo político y las expectativas de nuevos recortes de tipos también ocupan un lugar destacado en la mente de los inversores, aunque por un motivo ligeramente distinto.

La encuesta del sector privado del martes, que mostraba que la actividad de las fábricas chinas se expandió a un ritmo más rápido el mes pasado, contrastaba fuertemente con los datos oficiales del domingo, que revelaban que la actividad manufacturera se contrajo por tercer mes consecutivo en diciembre y se debilitó más de lo esperado.

La divergencia dibuja un panorama desigual de la accidentada recuperación pospandémica de la segunda mayor economía del mundo, e incluso la promesa del presidente Xi Jinping de apuntalar la recuperación económica del país este año ha hecho poco por restaurar la confianza de los inversores.

Acontecimientos clave que podrían influir en los mercados el martes:

- Francia PMI manufacturero S&P Global (diciembre)

- PMI manufacturero HCOB de Alemania (diciembre)

- Crecimiento anual del Money-M3 de la zona euro (noviembre)