Invertir en empresas que han replanteado su modelo de negocio para hacer frente a los retos del futuro es una forma de dar sentido a los propios ahorros. Además, este tipo de inversión no es incompatible con el rendimiento. Me pareció esencial seleccionar sólo ETFs de réplica total para este ejercicio, ya que garantizan que el inversor invierta realmente en las empresas que desea, lo cual es muy importante para los ETFs sostenibles.

Esta es la asignación de la cartera:


Fuente: Marketscreener.com

En primera posición, encontramos el iShares MSCI ACWI, que permite la exposición a una gran parte del mercado: incluye 57 países, desarrollados y emergentes, y pretende replicar casi todo el mercado de renta variable.

A continuación, encontramos dos ETFs BNPP Easy: el Global ESG Blue Economy y el Circular Economy Leaders, cada uno con un peso del 12,5% de la cartera. El primero invierte en 50 empresas que utilizan los recursos oceánicos de forma sostenible, con temas como el reciclaje, la gestión de residuos, el transporte marítimo, el ecoturismo, la energía eólica marina, la biotecnología marina y la pesca. La segunda se expone a 50 empresas seleccionadas porque han replanteado su ciclo de producción para limitar el uso de recursos y la producción de residuos. Los dos ETFs BNPP tienen la misma ponderación.

La cartera de bonos también pesa un 12,5%, con el ETF Lyxor US Treasury 10+Y. Este ETF mantiene 60 bonos del Tesoro estadounidense, la mitad de los cuales tienen un vencimiento medio de entre 10 y 25 años, y la otra mitad más de 25 años. El cupón medio está en torno al 2,6%. Este ETF contribuirá a limitar las pérdidas en caso de caída del mercado, ya que las acciones y los bonos están correlacionados negativamente.

Para incluir el sector inmobiliario en la cartera, se dedica un 10% a Vanguard Real Estate, que tiene exposición a REITs en una variedad de áreas, incluyendo hoteles, centros comerciales, residencias y oficinas, por ejemplo.

El SPDR MSCI Europe Health Care ETF permite una bolsa de salud bastante defensiva. Es uno de los pocos ETFs de salud que se replica físicamente, y por tanto ofrece una exposición real a valores como Roche, Novartis, AstraZeneca, Novo Nordisk o Sanofi.

Para potenciar la cartera e invertir en empresas medianas, encontramos el Lyxor MSCI EMU Small Cap, hasta el 10%.

Por último, la posición más pequeña es un ETF iShares STOXX Europe 600 Food & Beverage, que aporta un último toque de resistencia a la cartera.

He aquí el desglose sectorial y geográfico de la cartera:


Fuente: Marketscreener.com

Por lo que respecta a los sectores, la cartera está muy bien diversificada, sin que ningún sector esté sobreponderado. Encontramos un buen tercio defensivo, que reducirá en gran medida la volatilidad y las caídas. Desde el punto de vista geográfico, no sorprende que Estados Unidos ocupe el primer lugar, representando el 46% de la cartera. El Reino Unido, Francia y Suiza les siguen con entre un 7 y un 8% cada uno. La atención se centra en Europa, con una ponderación total del 45%.