P&O Ferries ha tenido problemas para mantener su servicio después de que el mes pasado despidiera a 800 trabajadores para recortar gastos, lo que provocó duras críticas del gobierno y desató protestas sindicales.

La Agencia Marítima y de Guardacostas británica (MCA) ha inspeccionado desde entonces varios buques de P&O y ha suspendido la navegación de cuatro de ellos. Desde entonces se ha permitido el regreso de tres.

P&O dijo que tras los problemas mecánicos, su transbordador europeo Causeway continuaba ahora su viaje programado al puerto de Larne en Irlanda del Norte con su propia propulsión, con remolcadores locales en espera.

El servicio de botes salvavidas RNLI dijo que había enviado tres botes salvavidas para asistir al transbordador de pasajeros.

"No se ha informado de heridos a bordo y se ha informado a todas las autoridades pertinentes", dijo un portavoz. "Una vez en dique se llevará a cabo una investigación independiente completa".