Un laboratorio de pruebas de un banco central mundial ha diseñado un prototipo de sistema de control del bitcoin destinado a ofrecer a las autoridades una imagen más clara de cómo, cuándo y dónde se utiliza la criptodivisa.

El proyecto del Banco de Pagos Internacionales (BPI), cuyo nombre en clave es Atlas, se inició en el banco central holandés hace más de cinco años, pero su valor potencial se ha visto subrayado en los últimos 18 meses por una serie de caóticos colapsos en toda la criptoindustria.

Atlas creó una plataforma de "prueba de concepto" que succiona datos tanto de los libros de contabilidad de criptomonedas "en cadena" disponibles públicamente como de los datos "fuera de cadena", más difíciles de obtener, de los que sólo informan algunas bolsas y usuarios.

Esa información proporciona entonces una imagen aproximada de la actividad de las criptodivisas, aunque como las criptocarteras pueden crearse de forma anónima y sin que el propietario especifique su ubicación, no es necesariamente precisa.

"Un análisis inicial de los datos recogidos por la plataforma indica que los flujos transfronterizos son sustanciales en términos económicos y están distribuidos de forma desigual entre las distintas regiones geográficas", declaró el BPI, aunque reconoció la "incertidumbre".

A los reguladores les preocupa cada vez más que la naturaleza descentralizada de las criptodivisas las convierta en un riesgo, especialmente tras el colapso el año pasado de las muy utilizadas stablecoin Luna y TerraUSD y de la plaforma FTX.

El prototipo de "centro de innovación" del BPI produce "cuadros de mando" que muestran información como cuántos bitcoin se están convirtiendo en dólares estadounidenses a determinadas horas en ciertas partes del mundo.

También pueden ofrecer una visión de la adopción y la importancia relativa de los mercados de criptomonedas a medida que aumentan o disminuyen su popularidad.

Los flujos transfronterizos de criptomonedas son especialmente relevantes para los bancos centrales en el contexto de los pagos transfronterizos, el análisis económico y las estadísticas de la balanza de pagos, según el BPI.

Pueden representar una parte significativa de las transferencias transfronterizas para algunos países que es difícil de cuantificar debido a las actuales lagunas en los datos.

"Los bancos centrales tienen que conocer de primera mano las criptomonedas y el DeFi y los riesgos y oportunidades que presentan para el sistema financiero", dijo el BPI.

Añadió que los cuadros de mando se pondrán ahora a disposición de un grupo de bancos centrales "de prueba" para recabar comentarios y para su posterior desarrollo. (Reportaje adicional de Elizabeth Howcroft en Londres Edición de Gareth Jones)