El Ministerio del Interior británico dijo que defendería su política, que es una parte central del plan del primer ministro Rishi Sunak para hacer frente al número récord de inmigrantes que llegan en pequeñas embarcaciones.

El gobierno afirma que el plan disuadirá a los traficantes de personas, aunque ha sido denunciado por grupos de derechos e incluso por el rey Carlos desde que se anunció en abril.

El primer vuelo de deportación previsto fue bloqueado en junio del año pasado por una sentencia de última hora del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que impuso una orden judicial que impedía cualquier deportación hasta que concluyera la acción legal en Gran Bretaña.

El mes pasado, el Tribunal Superior dictaminó que era legal que Gran Bretaña llegara a acuerdos con el gobierno ruandés para enviar allí a los solicitantes de asilo, pero estimó los recursos legales interpuestos por ocho solicitantes de asilo individuales.

Ahora se ha concedido a esos solicitantes de asilo más otro permiso para apelar por varios motivos, entre ellos que el Tribunal Superior se equivocó al decidir que la política de expulsión de Ruanda no era "sistemáticamente injusta".

También se concedió permiso en relación con si el Ministerio del Interior tenía derecho a basarse en las garantías dadas por Ruanda sobre las condiciones de los solicitantes de asilo que son enviados al país.

Un portavoz del Ministerio del Interior, el Home Office, declaró: "Nuestra innovadora asociación en materia de migración reubicará a cualquier persona que llegue al Reino Unido a través de rutas peligrosas e ilegales en Ruanda, donde se les apoyará para que puedan construir una nueva vida.

"Esto desbaratará a las bandas criminales de contrabandistas de personas que venden mentiras y ponen vidas en peligro.

"El tribunal confirmó previamente que esta política es legal y que cumple la Convención sobre los Refugiados, y estamos dispuestos a defenderla en cualquier vista de apelación".

Una abogada que representa a la organización benéfica Asylum Aid, a la que también se concedió permiso para recurrir la sentencia del Tribunal Superior, acogió con satisfacción la decisión.

Carolin Ott, del bufete de abogados Leigh Day, dijo en un comunicado: "Asylum Aid se siente aliviada de que el tribunal haya reconocido acertadamente que existen razones de peso para que su caso se vea en el Tribunal de Apelación".