"El punto en común entre estas 22 mujeres es que ninguna de ellas tiene nombre y que probablemente han muerto a causa de un acto violento", declaró Susan Hitchin, coordinadora de la unidad de ADN de Interpol, en una videollamada sobre el llamamiento, bautizado como "Operación Identifícame".

Las mujeres fueron encontradas en Bélgica, Países Bajos o Alemania, pero podrían proceder de otros países, dijo. También es posible que sus cuerpos fueran transportados allí para confundir las investigaciones.

El caso frío más antiguo, "La chica del aparcamiento", trata de una joven, de entre 13 y 20 años, encontrada por unos excursionistas en 1976 en Holanda y que la policía cree que procedía de Alemania. La policía estima que murió el mismo año en que se descubrió su cuerpo.

Otro es el de una mujer encontrada en Bélgica hace casi 32 años. Su cuerpo fue descubierto en 1991 en un pozo de agua de lluvia en la localidad de Holsbeek, a unos 40 km (25 millas) de Bruselas. Su cuerpo podría haber permanecido en el pozo hasta dos años.

La operación se centra en las víctimas femeninas, ya que "las mujeres se ven afectadas de forma desproporcionada por la violencia de género, como las agresiones sexuales, la trata de seres humanos y los malos tratos domésticos", explicó Hitchin.

"En investigaciones similares, establecer la identidad de la víctima ha conducido en última instancia a la detención de un sospechoso", declaró Anja Allendorf, de la policía alemana, en un comunicado en el que anunciaba la operación.

Hitchin señaló que la red mundial de Interpol llegará a un público más amplio y puede llevar a que alguien reconozca a su ser querido, a un amigo o a un colega.