El euro alcanzó el jueves su nivel más bajo frente al dólar desde 2017. A primera hora del lunes cotizaba ligeramente por encima.
La debilidad del euro encarece los bienes y productos básicos importados denominados en dólares -como el petróleo-, alimentando las presiones de precios que ya han llevado la inflación de la zona euro a niveles récord.
"Permítanme subrayar esto: vigilaremos cuidadosamente la evolución del tipo de cambio efectivo, como un importante motor de la inflación importada", dijo Villeroy en una conferencia en el Banco de Francia, que también dirige.
"Un euro demasiado débil iría en contra de nuestro objetivo de estabilidad de precios".
La Reserva Federal de Estados Unidos ha endurecido su política monetaria de forma más agresiva que su homóloga de la zona euro, aunque el BCE ha señalado que probablemente se unirá a otros grandes bancos centrales para aumentar el endeudamiento en julio.
Villeroy dijo que podría esperarse una reunión "decisiva" del consejo de gobierno del BCE en junio, seguida de un "verano activo" en el frente de la política monetaria.
"El ritmo de las nuevas medidas tendrá en cuenta los datos reales de actividad e inflación con cierta opcionalidad y gradualismo", dijo.
Añadió que los responsables de la política monetaria deberían "acercarse al menos al tipo neutral", en el que la postura monetaria del banco central no estimula la economía ni la frena.
El tipo de depósito del BCE se sitúa en el -0,5%, lo que significa que se cobra a los bancos por aparcar su efectivo ocioso en el banco central. Ha estado en territorio negativo desde 2014.
