Materias primas:

Energía: No es el efecto esperado. Arabia Saudí ha decidido actuar en solitario para sostener los precios del petróleo y desestabilizar las posiciones vendedoras. El Reino se ha comprometido a recortar unilateralmente su suministro en 1 millón de barriles diarios a partir del 1 de julio y por un periodo de un mes, recorte que puede prorrogarse en caso necesario. Sin embargo, esta iniciativa no ha provocado ninguna presión compradora sobre los precios del petróleo. La prueba está en el precio del barril, que sigue bajando, tanto para el Brent europeo (a 73 USD) como para el WTI estadounidense (a 68,30 USD). Ambas referencias no están lejos de sus mínimos del año. El mensaje es claro: la comunidad financiera sigue preocupada por los temores de recesión, en detrimento del endurecimiento del mercado del petróleo, que se acerca a pasos agigantados. Al mismo tiempo, los últimos datos de China son bastante tranquilizadores, ya que las importaciones de petróleo aumentaron un 17% intermensual.

Metales: Esta semana hubo pocas noticias en el segmento de los metales industriales. En general, los precios se estancaron en torno a los 8.300 USD para el cobre, 2.100 USD para el aluminio y 2.350 USD para el zinc. El oro subió un poco hasta 1960 USD, aunque sólo moderadamente, ya que China sigue acumulando oro en sus reservas de divisas. Pekín acumuló 0,5 millones de onzas de oro en mayo.

Productos agrícolas: Los precios de los cereales ganaron un poco de terreno esta semana en Chicago, con las fanegas de trigo y maíz cotizando a 628 y 600 céntimos respectivamente.

Principales índices de materias primas de S&P