En diciembre, Europa interrumpirá la mayor parte de sus compras de 3 millones de barriles diarios, lo que supondrá una presión adicional para que Rusia encuentre nuevos compradores para su petróleo, dijo Yellen en una conferencia organizada por la revista The Atlantic.

Europa se enfrentaba a un duro invierno con escasez de suministros energéticos al desvincularse de la energía rusa, dijo Yellen. Dijo que eso podría tener algunos efectos indirectos en Estados Unidos, pero que "no exageraría" el impacto potencial sobre el crecimiento estadounidense.