Las empresas cerraron su transacción el viernes tras obtener la aprobación de Gran Bretaña con la condición de que vendieran los derechos de streaming de los juegos de Activision a Ubisoft Entertainment para solucionar los problemas de competencia del regulador británico.

En Estados Unidos, la Comisión Federal de Comercio (FTC) también ha combatido el acuerdo y tiene programada una vista ante un tribunal de apelaciones el 6 de diciembre. La agencia dijo el viernes que seguía centrada en esa apelación.

"El nuevo acuerdo de Microsoft y Activision con Ubisoft presenta una faceta totalmente nueva de la fusión que afectará a los consumidores estadounidenses, que la FTC evaluará como parte de su procedimiento administrativo en curso", añadió la portavoz Victoria Graham. "La FTC sigue creyendo que este acuerdo es una amenaza para la competencia".