El prestamista irlandés pasó de una pérdida de 930 millones de euros en 2020 a un beneficio antes de impuestos de 629 millones de euros en todo el año, cuando reservó casi 1.500 millones de euros para cubrir posibles impagos de préstamos debido a la perturbación del COVID-19.

Retiró 238 millones de euros de esas provisiones, lo que ayudó a impulsar el beneficio hacia los 1.100 millones de euros de beneficio antes de impuestos que obtuvo en 2019, antes de que se produjera la pandemia.

El gobierno anunció en diciembre que planea reducir su participación del 71% en el banco en los próximos meses y el jefe de finanzas de AIB dijo a Reuters que la preferencia del banco es tratar con el estado sobre la recompra y que las discusiones están en curso.

(1 dólar = 0,9017 euros)