El posible acuerdo por docenas de reactores se produce en medio del empeoramiento de las relaciones entre Washington y Pekín, que han visto cómo las importaciones chinas de aviones, habitualmente equilibradas, se inclinaban hacia Airbus en los últimos años.

"Las negociaciones están en marcha", dijo un funcionario de la oficina de Macron, añadiendo que cualquier acuerdo de las empresas francesas no consistiría simplemente en volver a empaquetar anuncios anteriores.

Una fuente de la industria advirtió de que había varias partes móviles en las conversaciones, con detalles aún no ultimados. Airbus también tiene presencia industrial en China, incluida una planta de montaje.

Macron tiene previsto realizar una visita de Estado a China del 5 al 7 de abril, con una delegación de directivos de empresas con sede en Francia, entre los que se espera que se encuentre el consejero delegado de Airbus, Guillaume Faury.

Airbus declinó hacer comentarios sobre las negociaciones aéreas o la agenda de los altos directivos.

Los diplomáticos afirman que las visitas de alto nivel de Europa o Estados Unidos generan con frecuencia acuerdos aéreos que sirven de barómetro de los lazos diplomáticos, aunque los anuncios también suelen examinarse por su impacto económico adicional.

En julio del año pasado, las "tres grandes" aerolíneas estatales chinas se comprometieron a comprar un total de 292 reactores Airbus en el mayor pedido realizado por las compañías chinas desde el inicio de la pandemia del COVID-19.

En noviembre, la agencia estatal de compras de China dijo que había firmado un acuerdo por 140 reactores Airbus durante una visita del canciller alemán Olaf Scholz, pero el fabricante de aviones dijo que el anuncio cubría acuerdos que ya tenía en cartera, incluida parte del acuerdo de julio.