El inversor de Baloise zCapital había presionado para cambiar las normas, argumentando que haría más atractivo al grupo suizo, y su propuesta fue respaldada por influyentes asesores de voto, entre ellos Institutional Shareholder Services (ISS) y Glass Lewis.
En la actualidad, los accionistas no disponen de más del 2% de los votos, independientemente del tamaño de su participación, lo que significa que grandes inversores como BlackRock o UBS no pueden hacer valer plenamente su peso en la toma de decisiones. (Reportaje de Oliver Hirt; Edición de Noele Illien)