Bluestone Resources Inc. se centra en el desarrollo del proyecto de oro Cerro Blanco. Un estudio de viabilidad recientemente completado ha demostrado que se trata de una operación robusta, de rápida amortización y de alta ley, que producirá 2,6 millones de onzas de oro a lo largo de la vida útil de la mina, con un coste sostenido total de primer cuartil. Bluestone ha realizado importantes progresos en el avance del proyecto Cerro Blanco y, como resultado, ha llamado la atención de ciertos grupos antimineros, conocidos en la región por difundir información errónea sobre los impactos de los proyectos de desarrollo, como el de Cerro Blanco.

La empresa tiene conocimiento de un referéndum que se celebró en el municipio de Asunción Mita y que fue organizado por defensores de la antiminería. Estos grupos antimineros formaron una comisión sesgada (la "Comisión") para organizar un referéndum que retrató injustamente la opinión pública sobre las futuras actividades mineras dentro de los límites municipales. La Comisión responsable de la votación está compuesta en su totalidad por individuos con una agenda antiminera.

Durante el proceso del referéndum se observaron varias actividades tendenciosas e ilegales. Bluestone ha sido advertida por su asesor jurídico de que el referéndum no será legalmente vinculante. Además, se presentó un requerimiento legal contra el referéndum y un juez del departamento de Jutiapa, donde se encuentra el proyecto, dictaminó que se suspendiera.

A pesar de este fallo, la Comisión que celebra la votación ilegítima siguió adelante en contra de las órdenes del tribunal. Debido a la orden judicial contra la votación, la Compañía no participó activamente. El referéndum está en contra de las recomendaciones del Gobierno Central, ninguna entidad que no sean los organismos gubernamentales federales pertinentes tiene la jurisdicción legal sobre las licencias mineras en Guatemala.

El organismo electoral que gobierna Guatemala (Tribunal Supremo Electoral) se ha negado a participar e incluso se ha negado a proporcionar una lista registrada de votantes. Además, se cree que los resultados de la votación contenían un número de votos de personas no registradas que residían fuera del área de influencia. Además, la Comisión que estaba compuesta por individuos con agendas antimineras fue la encargada de contar los votos.

No se siguieron ni se tuvieron en cuenta las normas internacionales aceptadas para una votación de esta naturaleza. Los resultados reflejan un resultado que no es transparente ni está en consonancia con la comprensión de la empresa del sentimiento hacia el proyecto.