El minorista francés Casino está intentando iniciar negociaciones oficiales con sus acreedores mientras busca una salida a sus problemas financieros y sopesa dos ofertas de compra de inversores acaudalados, dijeron el miércoles dos fuentes cercanas al asunto.

Casino, dirigida y controlada por el veterano empresario Jean-Charles Naouri y propietaria de las cadenas Franprix y Monoprix, lleva años acosada por una abultada deuda, el descenso de sus ingresos y la pérdida de cuota de mercado en un mercado nacional cada vez más competitivo.

El grupo, que emplea a 208.000 personas en todo el mundo y es el sexto mayor minorista de alimentación de Francia por cuota de mercado, ha estado vendiendo activos para intentar arreglar sus finanzas, tensas por la deuda contraída a raíz de las adquisiciones. Tenía una deuda neta consolidada de 6.400 millones de euros a finales del año pasado.

Se enfrenta a 3.000 millones de euros de amortización de deuda en los próximos dos años, y el holding a través del cual Naouri la controla también está muy endeudado.

Casino ha solicitado la apertura de un procedimiento de conciliación, según dijo una de las fuentes el miércoles, lo que significa que pretende iniciar las conversaciones con los acreedores, entre los que se encuentran los grandes bancos franceses BNP Paribas y Credit Agricole, así como fondos de cobertura internacionales, bajo supervisión judicial.

Los acreedores tenían hasta las 15.00 GMT del martes para dar su consentimiento para iniciar el proceso, que luego sería lanzado oficialmente por un tribunal francés que también diría cuánto durarían las conversaciones y nombraría a los funcionarios encargados de supervisarlas.

Marc Senechal, un abogado francés, y Aurelia Perdereau, una administradora judicial, son vistos como posibles mediadores para supervisar las conversaciones, dijeron las fuentes.

El proceso está diseñado para llegar a un acuerdo sobre la deuda de Casino, pero también sobre cómo podrían afectar a la situación dos propuestas de ofertas de venta del grupo, una del multimillonario Daniel Kretinsky y otra del minorista más pequeño Teract.

Kretinsky, el segundo mayor accionista de Casino, ha ofrecido hacerse con el control de Casino mediante una ampliación de capital de 1.100 millones de euros. Ha supeditado su oferta a una reducción "sustancial" de la deuda bruta no garantizada mediante recompras y la conversión en capital de los bonos de Casino.

A principios de este mes, Standard & Poor's recortó su calificación de Casino, añadiendo más presión a la empresa, cuyas acciones han bajado más de un 30% en lo que va de 2023, tras haber caído un 58% en 2022.

"Creemos que el proceso de solicitud de consentimiento, combinado con los débiles resultados operativos del grupo, su frágil posición de liquidez y su insostenible estructura de capital hacen que un impago, un canje en dificultades o un rescate parezcan inevitables en un plazo de seis meses", afirmó.

Las acciones del casino fueron suspendidas el 23 de mayo, a la espera de la publicación de un comunicado. Cerraron a 6,76 euros el 22 de mayo. (Reportaje de Dominique Vidalon; Edición de Silvia Aloisi y Conor Humphries)