Cameco anunció que las primeras libras de mineral de uranio de la mina de McArthur River ya han sido molidas y empaquetadas en el molino de Key Lake, lo que marca el logro de la producción inicial a medida que estas instalaciones vuelven a operar normalmente. La producción se suspendió en McArthur River y Key Lake durante aproximadamente cuatro años a partir de enero de 2018 debido a la persistente debilidad del mercado mundial del uranio. En febrero de 2022, con una notable mejora del mercado en curso y un aumento de la actividad de contratación a largo plazo que añade volúmenes significativos a la cartera, Cameco anunció la siguiente fase de disciplina de suministro, que incluía el reinicio previsto de ambas operaciones.

Esta producción inicial es un hito importante para las operaciones y se produce como resultado de la finalización de las actualizaciones críticas de automatización, las comprobaciones de preparación para el mantenimiento y el restablecimiento del personal, la contratación y la formación para los puestos clave en ambas instalaciones. Ahora hay aproximadamente 730 empleados y contratistas a largo plazo trabajando en la mina y el molino -más de la mitad son de herencia indígena- con contrataciones adicionales previstas en el futuro. Las instalaciones continuarán con las actividades finales de puesta en marcha para garantizar que se puedan alcanzar las tasas de producción previstas y que se logren las condiciones normales de funcionamiento.

Se espera que McArthur River/Key Lake produzcan hasta 2 millones de libras (base 100%) de concentrado de uranio (U3O8) en 2022. A partir de 2024, Cameco planea producir 15 millones de libras de U3O8 (100% base) al año de estas operaciones, un 40% por debajo de su capacidad anual autorizada, como parte de la estrategia en curso para alinear las decisiones de producción con las necesidades de adquisición de los clientes. Cameco espera que la vuelta a la producción en McArthur River/Key Lake suponga una mejora significativa de los resultados financieros futuros.

La empresa prevé que será positivo para el flujo de caja y permitirá obtener una mayor parte de las ventas comprometidas a partir de libras producidas a menor coste. Además, la empresa ya no tendrá que cargar los costes de cuidado y mantenimiento directamente al coste de las ventas. Sin embargo, hasta alcanzar un ritmo de producción razonable, la empresa espera incurrir en unos costes de preparación operativa de entre 15 y 17 millones de dólares al mes, que se imputarán directamente al coste de las ventas.

La pandemia de COVID-19 y los retos relacionados con la cadena de suministro tienen el potencial de afectar a la disponibilidad de materiales, reactivos y mano de obra en McArthur River/Key Lake, lo que no sólo podría afectar a la producción de 2022, sino que también podría introducir un riesgo adicional en 2023. Cameco seguirá informando sobre el progreso del aumento de la producción en estas operaciones en el futuro.