Cathay dijo que la experiencia de los pasajeros que viajaban en su vuelo CX987 desde la ciudad suroccidental china de Chengdu a Hong Kong causó una "preocupación generalizada" y dijo que se disculpaba sinceramente.

"Hemos suspendido a los auxiliares de vuelo afectados y hemos puesto en marcha una investigación interna", declaró la aerolínea, añadiendo que cualquier "palabra o acto inapropiado" que violara sus normas y su ética profesional sería tratado con seriedad una vez confirmado.

Un pasajero del vuelo de Chengdu al centro financiero mundial escribió en un post en Internet que los auxiliares de vuelo se quejaban entre ellos de los pasajeros en inglés y cantonés. Dijeron que los auxiliares de vuelo se burlaban de otros por pedir una alfombra en lugar de una manta en inglés.

"Si no puede decir manta en inglés, no puede tenerla... la alfombra está en el suelo, siéntase libre si quiere tumbarse en ella", dijo una azafata según una grabación que circuló ampliamente por Internet. Reuters no pudo verificar la autenticidad del clip, que desató críticas en las redes sociales.

La compañía de bandera de Hong Kong ha estado intentando reconstruir la aerolínea mientras sale de la pandemia del COVID-19. Se vio muy afectada por las cancelaciones de vuelos relacionadas con el COVID, el cierre de fronteras y las estrictas medidas de cuarentena para la tripulación, lo que provocó drásticas reducciones de plantilla desde 2020.