El presidente del grupo chino Evergrande, Hui Ka Yan, está siendo investigado bajo sospecha de haber transferido activos al extranjero mientras el endeudado promotor inmobiliario lucha por completar proyectos inacabados, según informó el lunes el Wall Street Journal.

Evergrande ha estado trabajando para obtener la aprobación de los acreedores para reestructurar su deuda extraterritorial, pero el proceso se complicó la semana pasada cuando la empresa dijo que no podía emitir nueva deuda debido a una investigación sobre su principal unidad en China.

Para agravar aún más los problemas de la asediada promotora, el viernes dijo que su presidente estaba bajo vigilancia policial y era sospechoso de haber cometido delitos no especificados.

Reuters informó la semana pasada de que un grupo de acreedores extranjeros tenía previsto sumarse a una petición judicial para liquidar el promotor si no presentaba un nuevo plan de reestructuración de la deuda antes de finales de octubre.

Evergrande no respondió inmediatamente a una solicitud de Reuters para hacer comentarios durante las vacaciones del Día Nacional, que duran una semana.

Con más de 300.000 millones de dólares en pasivos, Evergrande se ha convertido en el ejemplo paradigmático de una crisis de deuda en el sector inmobiliario chino, que contribuye aproximadamente a una cuarta parte de la economía.

La cotización de las acciones de Evergrande y de dos de sus unidades se suspendió el jueves después de que los medios de comunicación informaran de que Hui había sido trasladado por la policía y estaba siendo vigilado en un lugar designado.