El Mecanismo de Ajuste Fronterizo del Carbono (CBAM) propuesto por la Unión Europea crea una nueva barrera comercial para las exportaciones chinas, afirmó el viernes la asociación siderúrgica china, respaldada por el Estado, que pidió más conversaciones con el bloque para abordar las cuestiones climáticas.

La UE aprobó en abril el primer plan mundial para imponer un gravamen a las importaciones de bienes con alto contenido en carbono a partir de 2026, dirigido a las importaciones de acero, cemento, aluminio, fertilizantes, electricidad e hidrógeno.

El gravamen supondría una gran amenaza para los productores de acero de China, primer exportador mundial de acero, mientras su producción siga siendo más intensiva en carbono que en la UE.

El nuevo régimen entró en fase de prueba en octubre, exigiendo a los importadores de mercancías a la UE que informen únicamente de las emisiones de carbono incorporadas a esos productos.

Se exigirá el pago de una tasa a partir de 2026, cuando esté plenamente en vigor.

La tasa fronteriza sobre el carbono pretende equiparar las industrias de la UE y sus competidores extranjeros, para evitar que los productores comunitarios se deslocalicen a regiones con normas medioambientales menos estrictas.

Sin embargo, también elevará los costes de los productos siderúrgicos enviados a la UE, debilitando la competitividad de los precios chinos.

"El establecimiento unilateral de la CBAM por parte de la UE es, en esencia, una nueva barrera comercial creada bajo el auspicio de las bajas emisiones de carbono", declaró la Asociación China del Hierro y el Acero (CISA).

Los comentarios de CISA se produjeron en respuesta a una consulta de Reuters enviada en septiembre, antes del inicio de la fase inicial de la CBAM.

La CBAM no tiene en cuenta las diferentes fases de desarrollo de los distintos países y va en contra del principio de "responsabilidades comunes pero diferenciadas", afirmó la asociación.

"Una vez que otros países adopten medidas recíprocas y similares de protección comercial para salvaguardar sus intereses, se traducirá en un aumento de los costes comerciales y de los riesgos de fricciones comerciales", afirmó CISA.

"Esperamos que la UE pueda considerar detenidamente los retos operativos y de costes que se plantean a sus consumidores de acero en sentido descendente debido al cambio en la estructura de las importaciones y entablar una mayor comunicación con todas las partes relevantes para abordar juntos los retos climáticos", añadió.

Es probable que el régimen aumente los costes de exportación de productos siderúrgicos de China entre un 4% y un 6%, según declaró a la prensa Jiang Wei, vicepresidente de la asociación, en una reunión informativa trimestral celebrada a finales de octubre.

La consultora Wood Mackenzie afirmó en septiembre que es probable que el CBAM eleve significativamente los costes de las importaciones de acero de India y China.

La India está sopesando opciones fiscales locales para evitar la tasa del carbono de la UE después de desvelar en mayo su plan de presentar una queja ante la Organización Mundial del Comercio por la tasa del carbono de la UE sobre las importaciones. (Información de Amy Lv y Dominique Patton en Pekín; Edición de Florence Tan y Sonali Paul)