El pagaré de la criptobolsa con vencimiento en 2031 cotizaba el martes a 51 centavos de dólar, por debajo de su máximo de agosto de 68,50, con unos rendimientos -que cotizan de forma inversa al precio- que saltaban al 13,1%, según datos de Refinitiv.

A principios de 2022, esos pagarés cotizaban más cerca de los 93 centavos de dólar.

En comparación, el rendimiento del bono del Tesoro estadounidense a 10 años cotizaba en torno al 3,806%.

El repunte del rendimiento de Coinbase y su creciente prima sobre el correspondiente rendimiento del Tesoro estadounidense a 10 años indicaron que los inversores están cada vez más preocupados por la solvencia de la criptobolsa.

El rendimiento de los pagarés de Coinbase con vencimiento en 2026 se situó en el 15,52%, tras tocar un máximo histórico del 15,78% el viernes.

Moody's Investors Service dijo el lunes que había puesto la calificación de la familia corporativa de Coinbase, actualmente en Ba3, en revisión para rebajarla.

Una calificación de Baa3 o inferior se considera territorio "basura" y altamente especulativo. Coinbase tiene una calificación un escalón por debajo.

Moody's dijo que el colapso de FTX ha aumentado el nivel de incertidumbre en la criptoindustria, planteando retos para todos los que operan en el sector.

Es probable que la criptobolsa vea "una creciente posibilidad de reducciones sostenidas en los volúmenes de negociación y en el compromiso de los clientes, que son factores importantes para los ingresos de Coinbase", dijo el vicepresidente y analista principal de Moody's, Fadi Abdel Massih.

Las acciones de Coinbase han perdido casi un 38% de valor este mes y el lunes cerraron en un mínimo histórico de 41,23 dólares. Su valor es aproximadamente una décima parte del nivel que tenían cuando salieron a bolsa con gran éxito en Nueva York en abril de 2021.