Revivimos este artículo publicado originalmente el 1 de mayo sobre la antigua filial de Bayer, después de que ADNOC confirmara que estaba considerando una oferta de 62 euros por acción.
El precio de la acción subió a unos 50 euros a raíz de ello, habiendo languidecido previamente a menos de 40 euros. Todo ello a pesar de la curiosa naturaleza "informal" del acercamiento y de un lenguaje muy cuidadoso por ambas partes.
Tres meses después, ADNOC reforzó aún más su oferta, sugiriendo que podría llegar a los 60 euros por acción. La noticia no entusiasmó al mercado y el precio de la acción se desplomó hasta los 47 euros.
Una vez más, se utilizaron curiosas precauciones lingüísticas, ya que se dijo que la oferta sólo se había comunicado "verbalmente" y que quedaba sujeta a amplios desarrollos: "discusiones abiertas", en inglés en el texto.
La reacción del mercado a estos anuncios refleja la reserva de los inversores. Desde luego, no han perdido de vista lo que está en juego a nivel político. Es cierto que cuesta creer que las autoridades alemanas vean con buenos ojos que una monarquía del Golfo Pérsico se haga con un buque insignia industrial nacional de esta manera.
En primer lugar, porque ya hay rumores de diferencias estratégicas entre ambas partes, sobre todo en materia de desarrollo sostenible; y en segundo lugar, porque el carácter oportunista de la oferta de ADNOC podría herir ciertas sensibilidades.
El planteamiento de los emiratíes llega en un momento en que Covestro -como la industria alemana en su conjunto- atraviesa un periodo muy difícil, penalizada por unos costes energéticos muy elevados y un clima económico deplorable.
El beneficio operativo del grupo se ha desplomado durante los dos últimos años, mientras que su deuda neta ha aumentado vertiginosamente. En los dos últimos años, el flujo de caja operativo apenas ha cubierto las inversiones, lo que ha obligado al Consejo de Administración a recortar el dividendo.
Los resultados trimestrales publicados ayer no indican ningún cambio en esta tendencia, sino todo lo contrario. Con este telón de fondo, ADNOC, que no tiene ningún problema con sus costes energéticos, podría considerarse tanto un caballero blanco como un ave de rapiña.
Dada la sensibilidad del terreno, no es de extrañar que el mercado sólo se lo crea a medias por el momento. En cualquier caso, más vale que los aficionados al arbitraje estén atentos a la situación.
Covestro AG es uno de los principales fabricantes mundiales de materiales poliméricos. Sus productos se utilizan principalmente en las industrias del automóvil, la construcción, la electrónica, el mueble y el textil. Las ventas netas se desglosan por familias de productos de la siguiente manera: - productos especiales (50,5%): materias primas para revestimientos, adhesivos y películas; - materiales de alto rendimiento (47,8%): poliuretanos (espuma de poliuretano flexible utilizada principalmente en tapicería de muebles, colchones y asientos de automóviles, y espuma de poliuretano rígida utilizada en la composición del aislamiento de edificios y equipos de refrigeración) y policarbonatos (policarbonatos de alto rendimiento utilizados en componentes de automoción, estructuras de techos y dispositivos médicos); - otros (16,3%). A finales de 2023, el grupo explotaba 48 centros de producción en todo el mundo. Las ventas netas se distribuyen geográficamente de la siguiente manera: Alemania (12,1%), Estados Unidos (21,8%), China (21,4%) y otros (44,7%).