"La inflación está resultando mucho más dura de lo que se pensaba", declaró Holzmann, miembro del Consejo de Gobierno del BCE encargado de formular las políticas, a la emisora de radio ORF 1. "Espero algunas subidas más de los tipos de interés", dijo, añadiendo que el alcance de los nuevos aumentos dependería de los datos.

A la pregunta de hasta dónde podrían llegar los tipos de interés, después de que el BCE elevara el jueves su tipo de refinanciación de referencia al 3,50%, respondió: "Algunos esperamos que se mantenga por debajo del 4(%). Me temo que probablemente superará el 4(%)".

El BCE subió el jueves los tipos de interés 50 puntos básicos, tal y como había prometido, manteniéndose firme en su lucha contra la inflación y haciendo frente a las peticiones de algunos inversores de frenar el endurecimiento de su política hasta que amainen las turbulencias en el sector bancario.

Preguntado sobre si veía el riesgo de otra crisis financiera mundial, como la de 2008, Holzmann respondió: "No, porque ambos -los problemas del Silicon Valley Bank y ahora el Credit Suisse- son problemas bastante especiales".

Credit Suisse se enfrentaba a "un problema de reestructuración de larga duración", añadió.

Volviendo a la cuestión del negocio ruso de Raiffeisen Bank International, Holzmann dijo: "Veo muchos retos pero es muy posible que se pueda encontrar una solución". No especificó cómo podría ser una solución.

Raiffeisen está profundamente arraigado en el sistema financiero ruso y es uno de los dos únicos bancos extranjeros que figuran en la lista del banco central ruso de 13 "instituciones de crédito de importancia sistémica", lo que subraya su importancia para la economía rusa, que está lidiando con las amplias sanciones occidentales.

Las acciones de Raiffeisen cayeron bruscamente el mes pasado después de que la empresa recibiera una solicitud de información de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos para "aclarar el negocio de pagos y los procesos relacionados que mantiene el RBI a la luz de los recientes acontecimientos relacionados con Rusia y Ucrania".

El Ministerio de Finanzas austriaco restó importancia a principios de este mes a las preocupaciones sobre el escrutinio de Raiffeisen por parte de los funcionarios estadounidenses encargados de las sanciones.