Rmeishi, que cursa el noveno grado, ayuda a su familia trabajando en el taller de reparación de coches de su padre en la capital, Sanaa, y espera tener más adelante un trabajo de oficio como mecánico, fontanero o electricista.

"Cuando empecé mi educación, cuando fui por primera vez a la escuela, todo lo que vi fue la guerra ... Afectó a mis estudios, a mi trabajo, afectó a todo el mundo", dijo en el taller, donde lavó y pulió un sedán azul y arregló un parachoques.

"Hemos desperdiciado suficientes años de nuestras vidas. Espero que la guerra se detenga y que vivamos en paz y seguridad".

La guerra entre el grupo Houthi, alineado con Irán, y una coalición liderada por Arabia Saudí, que entra en su octavo año el sábado, ha matado a decenas de miles de personas y ha dejado a 19 millones de personas dependientes de la asistencia alimentaria.

Unos 22 millones necesitan ayuda para acceder a los servicios sanitarios, 8,5 millones de niños requieren apoyo educativo y 16 millones necesitan ayuda para acceder al agua potable, según Naciones Unidas.

Los combates han desplazado a unos 4 millones de personas dentro de Yemen.

"Estamos perdidos, la gente está perdida, es como si estuviéramos enterrados bajo tierra", dijo Abdullah Hamzeh en el campamento de Darwan, cerca de Sanaa. "Mis hijos y yo estamos en la miseria, no tenemos ingresos, nada. Pedimos a Dios que esta guerra se detenga en todo Yemen".

La economía de Yemen se ha derrumbado y el flujo de mercancías hacia el país, que depende de las importaciones, se ha visto gravemente obstaculizado por las restricciones de la coalición en las zonas en poder de los houthis, que expulsaron de Saná al gobierno respaldado por Arabia Saudí a finales de 2014.

Naciones Unidas ha advertido que la mayor operación humanitaria del mundo en Yemen se reducirá aún más, incluyendo la asistencia alimentaria y sanitaria, después de que una campaña de promesas de contribuciones recaudara menos de un tercio de los 4.270 millones de dólares que se buscaban para 2022.

"Por favor, no olviden al pueblo de Yemen. Necesitamos su apoyo como comunidad internacional, necesitamos que sean activos en el proceso de paz", dijo Sami Fakhouri, jefe de la delegación de Yemen en la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, refiriéndose a los esfuerzos de paz dirigidos por la ONU.