"El aumento de los tipos de interés es consecuencia del incremento por parte del Banco Central Europeo de su principal tipo de política monetaria", dijo el banco central en un comunicado.

El diferencial de política monetaria con la zona del euro se mantendrá sin cambios, añadió.

A diferencia de la mayoría de los bancos centrales, Dinamarca no ajusta los tipos para controlar la inflación. Su único mandato es mantener la moneda de la corona dentro de una estrecha banda de tipos de cambio frente al euro, un objetivo que mantiene mediante intervenciones monetarias y movimientos de los tipos de interés.

Anteriormente, el jueves, el BCE subió su tipo de depósito de referencia en 50 puntos básicos hasta el cero por ciento, ya que la preocupación por la inflación desbocada superó a la preocupación por el crecimiento, incluso mientras la economía de la zona euro sufre el impacto de la guerra de Rusia en Ucrania.