El Departamento de Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales (DEFRA) del Reino Unido dijo el viernes que el gobierno le ha ordenado relajar temporalmente las condiciones de autorización de las centrales eléctricas de carbón en Inglaterra durante el periodo invernal.

"La dirección es para... abordar los problemas de seguridad energética si surgen, al tiempo que se pretende limitar la contaminación innecesaria", dijo en un comunicado.

La medida, que entrará en vigor entre el 1 de octubre y el 31 de marzo, se produce en un momento en que los países de toda Europa hacen planes de contingencia para el invierno después de que Rusia redujera los flujos de gas natural y dijera que los suministros podrían reducirse aún más o incluso interrumpirse.

Muchos líderes europeos han expresado su creencia de que las acciones de Moscú son una reacción a las sanciones occidentales sobre Rusia en respuesta a su invasión de Ucrania.

La empresa británica National Grid dijo el jueves que podría haber periodos en los que el suministro de electricidad sea escaso este invierno, pero que espera poder satisfacer la demanda.

Las centrales eléctricas de gas fueron responsables de más del 40% de la producción eléctrica de Gran Bretaña el año pasado, mientras que el combustible también se utiliza para calentar alrededor del 80% de los hogares británicos.

Los operadores de las plantas de carbón, como Drax y EDF, han estado agotando las existencias de carbón y preparándose para el cierre. El gobierno sigue comprometido con un plan a largo plazo para cerrar todas las centrales eléctricas de carbón del país antes de octubre de 2024 para ayudarle a alcanzar los objetivos climáticos.

Por otra parte, el gobierno ha dicho que permitirá que las centrales de generación de electricidad del Reino Unido, a las que se ha concedido una excepción de vida útil limitada (LLD), funcionen hasta el 30 de septiembre de 2024, para hacer frente a los problemas de seguridad energética si se presentan.