Los beneficios netos ascendieron a 980 millones de euros (1.050 millones de dólares) en el periodo de enero a septiembre, lo que supone un descenso anual del 11,4%.

Las provisiones para préstamos dudosos se situaron en 90 millones de euros en el tercer trimestre, frente a los 73 millones del mismo trimestre del año anterior.

Los bancos griegos redujeron sus ratios de préstamos dudosos por debajo del 8% en la primera mitad de 2023 desde el 45% de 2016, pero el ratio sigue siendo superior al de sus homólogos de la zona euro, herencia de una crisis financiera que ha durado una década.

El ratio de exposición a préstamos morosos (NPE) de Eurobank cayó al 4,9% de su cartera total de préstamos desde el 5,6% a finales de septiembre del año pasado.

El mes pasado, el banco fue el primero de los prestamistas griegos en poner fin a la participación estatal en su capital social mediante la recompra de una participación del 1,4% al fondo de rescate bancario HFSF, controlado por el Estado.

"La finalización de la recompra del 1,4% de las acciones este año irá seguida de un pago de dividendos en efectivo con cargo a los resultados financieros de 2023 el año que viene", declaró el consejero delegado Fokion Karavias en un comunicado.

Los prestamistas griegos han vuelto a obtener beneficios en los últimos años y esperan reanudar el pago de dividendos en 2024, por primera vez desde que estalló la crisis de la deuda griega en 2010.

(1 dólar = 0,9362 euros)