La exigencia del presidente Vladimir Putin de pagar en rublos hizo subir los precios del gas en Europa y aumentó la preocupación por las interrupciones del suministro en la UE, que obtiene cerca del 40% de su gas de Rusia.

Alemania e Italia afirmaron que la medida podría incumplir los contratos de suministro de energía. El canciller alemán, Olaf Scholz, dijo que la moneda que deben pagar las empresas alemanas por los combustibles fósiles rusos está fijada en sus contratos.

"Hay contratos fijos en todas partes, y la moneda en la que se deben pagar las entregas forma parte de estos contratos... en la mayoría de los casos dice euros o dólares", dijo Scholz a su llegada a una cumbre de la UE en Bruselas el jueves.

El primer ministro italiano, Mario Draghi, se hizo eco de esta afirmación. "Esto es básicamente un incumplimiento de contrato, esto es importante de entender", dijo.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, estuvo de acuerdo y dijo que la medida era un intento de eludir las sanciones de la UE contra Rusia.

"No permitiremos que se eludan nuestras sanciones. La época en la que la energía podía utilizarse para chantajearnos ha terminado", dijo.

Los pagos en rublos apuntalarían la moneda rusa, que se ha desplomado desde la invasión del 24 de febrero. El discurso de Putin hizo subir el rublo un 9% frente al dólar el miércoles.

Los analistas dijeron que los pagos en rublos serían posibles sin romper las sanciones de la UE, que no afectan directamente a los suministros de petróleo y gas, pero apuntan a los bancos que podrían estar involucrados en las transacciones en rublos.

El principal exportador de gas ruso, Gazprom, tiene más de 40 acuerdos de gas a largo plazo con contrapartes europeas, y Europa paga cientos de millones de euros al día a Moscú por el combustible fósil.

Según Gazprom, alrededor del 97% de sus ventas de gas a Europa y a otros países se liquidaron hasta el 27 de enero en euros o dólares estadounidenses.

Una interrupción de las importaciones rusas de petróleo y gas afectaría a algunos países de la UE más que a otros. Alemania, la mayor economía y consumidor de energía de Europa, recibe el 18% de las exportaciones de gas de Rusia y el 11% de su petróleo.

El presidente lituano, Gitanas Nauseda, dijo que "no estaba asustado" por la demanda de Putin, ya que Letonia no importa crudo ruso y podría sustituir el gas ruso por gas natural licuado de otros lugares.

"Nadie pagará en rublos", dijo el primer ministro de Eslovenia, Janez Jansa.