El Consejo de Seguridad de la ONU se reunirá el martes para debatir sobre el "sabotaje" después de que Moscú pidiera una investigación independiente sobre los atentados de septiembre contra los gasoductos que vertieron gas en el mar Báltico.

Suecia y Dinamarca, en cuyas zonas económicas exclusivas se produjeron las explosiones, han llegado a la conclusión de que los gasoductos fueron volados deliberadamente, pero no han dicho quién podría ser el responsable.

"Han pasado casi cinco meses desde el sabotaje de los gasoductos Nord Stream 1 y Nord Stream 2. Sin embargo, durante todo este tiempo, las autoridades suecas, como si fuera una señal, guardan silencio", dijo la embajada de Rusia en Suecia en la plataforma de mensajería Telegram. "¿De qué tienen tanto miedo los dirigentes de Suecia?".

La embajada reiteró la pregunta del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso de si Suecia tenía algo que ocultar sobre las explosiones.

También reiteró la postura de Moscú, sin aportar pruebas, de que Occidente estaba detrás de las explosiones que afectaron a los gasoductos Nord Stream 1 y 2, proyectos de infraestructura multimillonarios que llevaban gas ruso a Alemania.

La construcción del Nord Stream 2 finalizó en septiembre de 2021, pero nunca llegó a ponerse en funcionamiento después de que Alemania archivara la certificación pocos días antes de que Rusia enviara sus tropas a Ucrania hace un año, esta semana.

El embajador adjunto de Rusia ante la ONU, Dmitry Polyanskiy, dijo en Telegram que a finales de semana se votaría un borrador de propuesta que pedía una investigación.

La agencia de noticias estatal rusa TASS informó de que el representante permanente de China ante las Naciones Unidas, Zhang Jun, había dicho a los periodistas que Pekín apoya el borrador de la propuesta rusa.

Reuters no pudo verificar el informe de TASS.

China considera a Rusia como un aliado, contrapeso del poder mundial de Estados Unidos, y hasta ahora se ha abstenido de condenar la invasión rusa de Ucrania, al tiempo que ha instado repetidamente a la paz.

El máximo diplomático chino, Wang Yi, se encuentra en Moscú para mantener conversaciones sobre un posible plan de paz para Ucrania en el primer aniversario de la invasión rusa de Ucrania que ha matado a miles de personas, desplazado a millones y convertido en escombros muchas ciudades ucranianas.