La startup de inteligencia artificial OpenAI, respaldada por Microsoft, hizo el lunes una apuesta por los negocios en Japón al abrir su primera oficina asiática en Tokio.

La startup, que ha causado expectación entre los consumidores desde el lanzamiento de su chatbot de IA generativa ChatGPT a finales de 2022, está buscando nuevas fuentes de ingresos a nivel mundial.

El consejero delegado de OpenAI, Sam Altman, y el director de operaciones, Brad Lightcap, han recibido este mes a cientos de ejecutivos de empresas de la lista Fortune 500 en Estados Unidos y Gran Bretaña para presentarles sus propuestas de negocio, según ha informado Reuters.

Altman dijo el año pasado que estaba considerando una sede en Japón tras reunirse con el primer ministro Fumio Kishida. La startup también ha abierto oficinas en Londres y Dublín.

Japón espera sacar partido de la IA en su intento de competir con una China cada vez más asertiva, acelerar el cambio hacia los servicios digitales y aliviar la creciente escasez de mano de obra.

OpenAI dijo el lunes que tiene un modelo personalizado optimizado para el idioma japonés y que Tadao Nagasaki, que fue presidente de Amazon Web Services en Japón, dirige el negocio japonés.

Aunque el país se considera rezagado en esta tecnología, empresas locales como las telecos SoftBank y NTT están invirtiendo en grandes modelos lingüísticos.

Microsoft dijo la semana pasada que invertiría 2.900 millones de dólares a lo largo de dos años en infraestructuras para la nube y la IA en Japón, como parte de una oleada de inversiones a nivel mundial por parte de los gigantes tecnológicos estadounidenses. (Reportaje de Sam Nussey; Edición de Christopher Cushing)