Keysight Technologies, Inc. y ETAS se asocian para proporcionar a los fabricantes y proveedores de la industria del automóvil una solución integral de ciberseguridad para garantizar la protección de los vehículos cuando salen a la carretera. Gracias a este acuerdo, la herramienta fuzzer inteligente para automoción ESCRYPT CycurFUZZ de ETAS se integrará en la plataforma de pruebas de ciberseguridad para automoción de Keysight. La creciente conectividad de los sistemas de automoción expone a los vehículos conectados a riesgos de ciberseguridad que deben mitigarse para garantizar el desarrollo de vehículos seguros y protegidos.

Un componente de una prueba de seguridad eficaz y completa es el fuzzing, un método de automatización de pruebas que inyecta entradas no válidas, malformadas o inesperadas en un dispositivo para revelar defectos y vulnerabilidades. Al integrar ESCRYPT CycurFUZZ en la solución de ciberseguridad para automoción de Keysight, los fabricantes de automóviles pueden realizar rápidamente pruebas de fuzzing a través de interfaces de red de área de controlador (CAN). Totalmente integrada en la solución de Keysight, la herramienta CycurFUZZ proporciona un software inteligente para hacer fuzzing del bus CAN a nivel de módulo o de sistema.

Esto ofrece una forma eficaz de escanear automáticamente el bus CAN de automoción del dispositivo bajo prueba en busca de vulnerabilidades desconocidas y descubrir los puntos débiles del software. La integración de ESCRYPT CycurFUZZ garantiza la mitigación eficaz de los riesgos de ciberseguridad asociados al bus CAN. La solución de ciberseguridad para automoción de Keysight permite realizar pruebas automatizadas de todas las capas de la pila de intercomunicación de sistemas abiertos (OSI) para interfaces a bordo de vehículos, como Wi-Fi, celular, Bluetooth, CAN y Ethernet para automoción, con el fin de validar la solidez de los subcomponentes de la unidad de control electrónico (ECU) y la unidad de control telemático (TCU), o de todo el vehículo.

Además, la solución permite a los fabricantes y proveedores de automóviles cumplir las normativas internacionales de ciberseguridad, como la UN R-155 y la ISO /SAE 21434.