Las cámaras de compensación de la Unión Europea fueron capaces de hacer frente por primera vez a shocks teóricos que incluían las consecuencias del cambio climático, según afirmaron el martes los reguladores de la UE, al tiempo que subrayaron el actual dominio de los operadores británicos en algunas clases de activos.

Las cámaras de compensación se interponen entre los compradores y los vendedores de valores, garantizando que sus operaciones se completen incluso si una de las partes quiebra.

La Autoridad Europea de Valores y Mercados (AEVM) comprobó cómo 16 cámaras de compensación, incluidas las que pertenecen a bolsas como Euronext, Deutsche Boerse, ICE, London Stock Exchange Group y Cboe, se enfrentaban en general a varias perturbaciones teóricas, como el impago de varios usuarios.

"La quinta prueba de resistencia de la AEVM confirmó la resistencia general del panorama europeo de las cámaras de compensación ante graves escenarios de tensión crediticia y de liquidez", declaró en un comunicado Klaus Loeber, presidente del comité de cámaras de compensación de la AEVM.

Sin embargo, algunas cámaras de compensación deben reforzar la gestión del riesgo o la forma en que tratan la "concentración".

Los participantes en el mercado con grandes posiciones en una determinada clase de activos se enfrentan a requisitos "adicionales" o extra de margen, o efectivo depositado en las cámaras de compensación para ayudar a cubrir cualquier impago.

En el caso de muchas clases de activos, una sola cámara de compensación se hace cargo de la mayor parte de los "add-ons" en todo el mercado, como en el caso de los derivados de tipos de interés, o los derivados de divisas en los brazos de compensación LCH del London Stock Exchange Group en Londres, según la AEVM.

ICE domina los derivados de materias primas y los complementos de compensación de derechos de emisión, pero en el caso de las acciones y los derivados de renta variable y de crédito, no existe una única entidad compensadora dominante, señaló la AEVM.

La UE ha aprobado una ley destinada a reducir la fuerte dependencia del bloque de compensadores como LCH e ICE en Londres.

El permiso de la UE para que LCH e ICE sigan prestando sus servicios a los clientes del bloque directamente desde Londres expira en junio del año que viene, pero los resultados de las pruebas de la ESMA ponen de relieve el reto que supone reducir su posición dominante sobre sus rivales de la UE en un corto periodo de tiempo.

El organismo de control dijo que la mayoría de los compensadores han empezado a integrar el riesgo climático de activos como acciones y bonos en sus pruebas de estrés internas.

"Este análisis exploratorio debe entenderse como un criterio para seguir actuando en relación con la supervisión de los riesgos climáticos", dijo la AEVM.