PLANEGG/MÚNICH (dpa-AFX) - La investigadora farmacéutica Morphosys, que está a punto de ser absorbida por Novartis, volvió a entrar en números rojos el año pasado. Los elevados costes de investigación, los menores ingresos financieros y el descenso de las ventas se tradujeron en una pérdida de algo menos de 190 millones de euros, según anunció la empresa SDax el miércoles por la noche en Planegg, cerca de Múnich. Un año antes, la pérdida había ascendido a unos buenos 151 millones de euros.

En 2022, sin embargo, los bávaros se habían beneficiado de los elevados ingresos por licencias de la farmacéutica suiza Novartis, ausente el año pasado. Con 238,3 millones de euros, los ingresos de 2023 fueron, por tanto, un 14% inferiores a los del año anterior. Esta vez, Morphosys registró una pérdida de explotación de 252,5 millones de euros, tras una pérdida de algo menos de 221 millones un año antes. Esto significa que el Grupo obtuvo mejores resultados de lo que los analistas temían por término medio.

En bolsa, sin embargo, es probable que las cifras sean sólo un asunto menor, ya que se espera que Morphosys sea adquirida por Novartis en breve. Ya se han recibido las autorizaciones antimonopolio iniciales de Alemania y Austria, mientras que las empresas de EE.UU. siguen esperando la luz verde. "El proceso de adquisición avanza a buen ritmo y esperamos que la operación prevista concluya en el primer semestre del año", declaró Jean-Paul Kress, Director General de Morphosys, según el comunicado de prensa. Esto no cambiaría el calendario actual./tav/stw/jha/