Pemex de México es la mayor preocupación de liquidez y deuda entre sus pares latinoamericanos, dijo Fitch Ratings el miércoles, a pesar de los miles de millones de dólares en apoyo gubernamental para la empresa estatal de energía.

Después de haber emitido algunos de los bonos de mercados emergentes más populares del mundo, Pemex sigue siendo popular entre los inversores que apuestan por el apoyo incondicional del presidente nacionalista energético de México, Andrés Manuel López Obrador.

Pemex, la empresa energética estatal más endeudada del mundo, tiene 25.000 millones de dólares en deuda a corto plazo y 4.000 millones de dólares en bonos que aún vencen en 2023, dijo la agencia de calificación Fitch en un informe.

"Pemex plantea la mayor preocupación de vencimiento y liquidez", dijo Fitch, señalando que a medida que la mayoría de los prestatarios corporativos refinancian la deuda a más corto plazo que vence entre 2024 y 2026, se corre el riesgo de crear una competencia significativa para la empresa mexicana.

Entre sus pares de la región -incluidas la argentina YPF, la brasileña Petrobras y la colombiana Ecopetrol- Pemex también tiene la relación deuda total/reservas probadas más alta, de 14,70 dólares por barril de petróleo equivalente (boe), dijo Fitch.

Mientras tanto, los costos de levantamiento de Pemex aumentaron a 26.15 dólares por barril en 2022 desde 19.14 dólares por barril un año antes.

En 2020, Pemex se convirtió en el mayor "ángel caído" del mundo: un prestatario cuya calificación desciende a basura desde el grado de inversión.

"Las calificaciones de Pemex están cuatro escalones por debajo de las del soberano como resultado del débil perfil crediticio autónomo de la empresa y la lenta reacción del gobierno para fortalecer la estructura de capital de Pemex y las consideraciones ESG (ambientales, sociales y de gobernanza)", dijo Fitch.

Pemex no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.

El mes pasado, el director financiero de Pemex, Carlos Cortez, dijo a los inversores durante una llamada de resultados que, a pesar del apoyo gubernamental, la dirección estaba evaluando si recurriría a los mercados de bonos este año o el próximo.

La deuda financiera de Pemex asciende ahora a 110.000 millones de dólares, la mayor parte en bonos. Entre 2019 y finales de junio, Pemex recibió más de 730.000 millones de pesos (42.000 millones de dólares) del gobierno. (Reportaje de Stefanie Eschenbacher; Edición de Dave Graham y Jacqueline Wong)